
El jueves 1 de diciembre, la CONASAMI (Comisión Nacional de Salarios Mínimos) anunció el aumento del salario mínimo de 73.04 a 80.04 pesos, que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2017, aclarando que los mínimos profesionales sólo tendrán un incremento de 3.9% El motivo del aumento de 7 pesos se trata principalmente de sumar el porcentaje que año con año se da (3.9%) y el Monto Independiente de Recuperación (MIR) que fue de 4 pesos.
Es importante mencionar que el tope a las prestaciones que estaba vinculado al salario mínimo no se incrementará en la misma proporción que el aumento anunciado, ahora se determinará tomando como referencia la Unidad de Medida y Actualización (UMA), cuyo valor inicial fue de 73.04 pesos y que se actualizará anualmente conforme a la inflación registrada en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
Estos son hechos importantes, sin embargo, son sólo parte de un proceso de cambio de la política salarial en México que, según varios organismos, pretende la recuperación gradual del poder adquisitivo del salario. En el presente artículo, se analiza este proceso de cambio con base a información oficial de reciente publicación, información que es necesario analizar para entender la etapa en la que estamos y poder incluso adelantarnos a los cambios que podrían presentarse.
Hay varias preguntas respecto a la nueva política salarial que las empresas se deberían de hacer o que tal vez ya se están haciendo: ¿Afectará la manera en que definen sus estrategias de compensaciones?, ¿en qué medida?, ¿qué nuevos retos trae consigo? y sobre todo, ¿qué herramientas necesitan para hacerle frente?. El objetivo del presente artículo es desarrollar el contexto que podría dar respuesta a estas y otras preguntas relacionadas.
Es de vital importancia que las empresas estén preparadas y cuenten con un buen estudio de sueldos y salarios que les permita monitorear qué es lo que está ocurriendo en el mercado laboral y les ayude a seguir creando estrategias para mantener su competitividad.
El contexto…
El 8 de noviembre del presente año se hizo público el Informe Final de la Comisión Consultiva para la Recuperación Gradual y Sostenida de los Salarios Mínimos Generales y Profesionales, Comisión creada con el fin de hacer frente a la fuerte caída del poder adquisitivo del salario mínimo en México y proponer una recuperación gradual y sostenida de este.

Dicho informe se mantuvo oculto durante más de un año y es de vital importancia, ya que establece el marco y las bases que están determinando la nueva política salarial, por lo cual múltiples voces se hicieron escuchar para que por fin se hiciera público, ahora lo puedes consultar en la página oficial de la CONASAMI.
Desde hace varios lustros que los incremento en los sueldos y salarios siguen la tendencia del incremento de la inflación. Aunque las empresas consideran otros factores como el desempeño y la antigüedad, la inflación sigue siendo el factor predominante…hasta ahora.
Principales ataduras del salario mínimo
Antes de analizar los principales cambios que se esperan en materia de política salarial, primero echemos un vistazo a los principales factores que, según el informe anteriormente mencionado (Capítulo I), explican el rezago del poder adquisitivo del salario mínimo, ya que estos son la clave para entender los cambios en marcha.
1. El bajo crecimiento del país durante las últimas 4 décadas, principalmente por crisis recurrentes, períodos de alta inflación, devaluaciones, etc, período durante el cual se han registrado la mayores pérdidas del poder adquisitivo del salario mínimo. Cabe mencionar que hasta ahora “el desempeño de la productividad no ha sido un criterio incorporado en los factores de fijación del salario mínimo”.

2. Uso del salario mínimo como unidad de cuenta para aspectos ajenos a su mandato constitucional durante más de tres décadas. Además de su uso como referente para el pago de multas, recargos, prestaciones, etc. , quizá lo más grave es cuando en 1992 “se dispuso que el saldo de los créditos para la vivienda de los trabajadores otorgados por ….(INFONAVIT y FOVISSSTE), se incrementarán en la misma proporción en que se incrementarán los salarios mínimos”.

3. El efecto faro. Este término acuñado por el Banco de México no es más que el efecto que tienen los incrementos del salario mínimo sobre los salarios contractuales y de la mayoría de los salarios vigentes del país. En el informe se menciona la magnitud del efecto faro: “el Banco de México estima que un incremento del salario mínimo de 1 por ciento ocasiona un aumento promedio de 0.85 por ciento en los salarios de los trabajadores del sector formal de la economía”.

Hoy en día es tan común pensar que todos los sueldos y salarios tienen una relación con el incremento en el salario mínimo, que es difícil imaginar que antes no era así, fue a partir de los Pactos de Solidaridad Económica de 1987 que se decretó que los incrementos en los salarios mínimos se harían extensivos a los salarios contractuales, esto como una medida para hacer frente a las altas tasas de inflación de aquel entonces, aunque estos acuerdos ya no están vigentes, su uso se arraigó como consecuencia de la costumbre.
Entonces…¿Qué determinará la nueva política salarial?
Es con base a estas tres principales ataduras del salario mínimo que el Informe desarrolla una serie de “programas y acciones que se están o deben aplicarse para superar las limitaciones para la instrumentación de la nueva política de salarios mínimos”.
De hecho, la Comisión Consultiva desarrolla un capítulo por cada una de estas tres ataduras (Capítulos II, III y IV). A continuación, se enumeran a modo de resumen las acciones y programas más importantes por cada una de estas:
Bajo crecimiento económico del país.
En el informe se propone continuar con las Reformas Estructurales que se están llevando a cabo en México, pero sobre todo, propone la elaboración de una fórmula que integre múltiples factores socio-económicos, con el fin de considerarla como información complementaria en la determinación de los incrementos salariales. Entre estos factores, menciona la importancia de incluir, además de las necesidades de los trabajadores y sus familias, la productividad y competitividad del país con el fin de que los aumentos en el salario mínimo estén sustentados o vinculados al aumento de productividad y tasa de crecimiento. “Una política que busque el aumento del salario mínimo debe reflejar las condiciones reales de la economía del país y, en específico, del mercado laboral”.
Uso del salario mínimo como unidad de cuenta.
El paso más grande que se ha dado es la desindexación del salario mínimo, ya que se han modificado alrededor de 148 leyes para poder desvincular su uso como unidad de cuenta y se reemplazó por la Unidad de Medida y Actualización (UMA). Es por esta razón que, como se mencionó al inicio, el tope de las prestaciones ya no estará determinado por el incremento al salario mínimo, lo mismo que los créditos del infonavit, entre otras cosas. El informe elabora un recuento del proceso que hizo posible este logro y menciona que “el que se haya avanzado en la desindexación del salario mínimo constituye un avance significativo para eliminar una de las ataduras más fuertes que existían para una recuperación gradual y sostenida del salario mínimo”.
El efecto faro
El Informe analiza a detalle los estudios sobre el efecto faro realizados por diferentes organismos y sus implicaciones para la economía, señalando que la desindexación del salario mínimo no tiene ningún impacto en el efecto faro. Declarando además que “para que una política de recuperación del salario mínimo sea efectiva es necesario buscar modos de eliminar el efecto faro para evitar distorsiones significativas sobre el mercado laboral. De esta forma, se podrá incrementar el nivel del salario mínimo para ayudar a los trabajadores que perciben ese salario sin ocasionar incrementos salariales generalizados desligados de las condiciones de la economía, de manera que no se incremente la inflación ni se afecte el funcionamiento del mercado laboral y de la economía en general.”

En resumen, estos son los factores que, según el informe mencionado al inicio, determinarán la nueva política salarial en México, sin embargo, existe mucha tensión en el país entre diferentes organizaciones y agrupaciones, pues esta situación ha generado fuertes expectativas de cambio, pero también incertidumbre.
¿Y la incertidumbre internacional?
Hasta ahora se analizó el tema desde la lógica desarrollada en el Informe, sin embargo, cabe mencionar que dicha lógica se sustenta en el contexto actual de libre comercio e incluso su éxito está sustentado en la continuación y reforzamiento de políticas derivadas de este modelo, como son las múltiples reformas que México está poniendo en marcha: educativa, energética, financiera, de telecomunicaciones, etc.
La salida de Gran Bretaña de la Unión Europea (Brexit) y la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos de América (EUA) son dos acontecimientos que ponen en riesgo el propio modelo del libre comercio, ¿qué pasaría si Donald Trump decidiera que EUA se salga del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)? Varios medios han hablado de esta posibilidad y su probable impacto en la economía mexicana, la pregunta es, ¿la salida de EUA del TLCAN pondría en jaque toda la estrategia desarrollada en el informe?
Ahora más que nunca las empresas necesitan un buen Estudio de Compensaciones
Parece que la incertidumbre será el principal ingrediente que caracterizará este 2017, ahora más que nunca es indispensable que las empresas cuenten con información actualizada sobre las estrategias de compensaciones que otras empresas están y seguirán adoptando para hacer frente a los nuevos cambios en materia de política salarial en México. Es a través de una encuesta de sueldos y salarios que se puede monitorear si algún cambio sustancial ha ocurrido.
Sistemas Humanos, el elemento de su empresa® cuenta con el Estudios de Compensaciones más actualizado del mercado, dicho estudio está dividido por regiones y sectores, cuenta con una muestra de más de 200 empresas y toma como base más de 250 puestos-tipo, por lo cual, puede proveer a las empresas con información valiosa que les ayudará a seguir definiendo sus estrategias de compensaciones de manera clara, permitiendo estar un paso adelante de aquellas empresas que dejan a la deriva algo tan importante como la correcta gestión de recursos humanos.
Nos hacemos bolas con la información referida, la realidad es que el SM es un punto de referencia solamente, porque no existe un sector empresarial, domestico, comercial que pague salarios mínimos. Debemos trabajar con la información que INEGI tiene y reconocer el salario base con el que se trabaja. Esto de 73.04 y 80.04 como un gran logro de reconocimiento y recuperación del poder adquisitivo no es cierto. Planteo que INEGI establezca este salario y no hablo del profesional. PD. el que las multas, actualización de crédito etc. estén ligados al SM, es otro caso porque se recalculan y cuando existan contratos ya establecidos ligados al SM, se legisla y se aprueba que el nuevo salario mínimo xxx no se considerará para los efectos anunciados. Gracias.